Alimentación saludable
- ProductosPetFit
- 24 nov 2018
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Usar un alimento concentrado acorde a la raza y especie: Los perros y gatos requieren distintas cantidades de nutrientes en la dieta, es por esto que su alimentación debe ser diferente.
Un alimento para cada etapa de la vida: Los cachorros requieren más proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales para el desarrollo de los tejidos del organismo, en comparación con la edad adulta.
Mantener un horario de alimentación adecuado: La frecuencia de comidas varía en perros y gatos. Los perros deben comer entre 2 a 3
veces al día y cuando lo hacen, terminan con toda la ración, mientras que los gatos comen más seguido, en pequeñas cantidades, varias veces al día.
Tener en cuenta la cantidad de comida: La porción de comida depende del tipo de alimento que se esté ofreciendo y la condición física de la mascota.
Ofrecer alimentación especial en la enfermedad: Diversos tipos de enfermedades requieren un cambio alimenticio ya que el contenido nutricional puede llegar a alterar la función de un organismo afectado.
Agua fresca y potable todo el día: Las mascotas al jadear, caminar y correr, van perdiendo agua durante el día, incluso cuando están en reposo, por lo tanto, es necesario mantener agua fresca y potable a su disposición.
Cuidado con los alimentos tóxicos para mascotas: Existen alimentos de consumo humano que contienen sustancias tóxicas para las mascotas. Dentro de ellos están el Chocolate, Té, Café, Alcohol, Cebolla, Ajo, Uvas, Macadamias, Goma de mascar y Aguacate. Debes evitar darlos y no dejarlos a su disposición
Alimentos prohibidos
- El chocolate produce intoxicación en las células y, dependiendo de la cantidad, puede ocasionar hiperactividad o nerviosismo en las mascotas. - Aunque un poco menos dañinos, el té y el café tampoco deben estar en la dieta. - Las cebollas y los ajos producen alteraciones en los glóbulos rojos, las cuales pueden convertirse en anemia. - Una pequeña cantidad de uvas y pasas puede conducir a daño renal irreversible. - La grasa en las sobras de las comidas de un humano y los huesos
suelen causar un malestar estomacal, diarrea y vómitos en los gatos. - En gatos y perros, los huesos pueden conducir a asfixia o crear obstrucciones en el tracto digestivo de las mascotas. - El alcohol hace que se altere su sistema nervioso y puede hasta variar su comportamiento.
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